Es un capuchino negro, oriundo de un zoológico. No le caen bien los hombres, pero en cambio cada vez que ve una mujer, él les presume. Y como ama tanto a las mujeres humanas, a las hembras de su especie solo las puede ver como amigas. No le gusta la comida en su comedero así que cada vez que se la damos, lo tira al piso y la come desde ahí.